Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

El Sr. Ministro de la GOBERNACIÓN (interino de Hacienda, Sagasta): Muy pocas palabras debo pronuncia en contestación al discurso con que acaba de explanar el Sr. Ruiz Gómez su interpelación. Su señoría ha hecho la historia del expediente de que se trata, y una vez hecha esa historia, y una vez manifestadas al Congreso las causas que hicieron necesaria la variación que se advierte en el expediente, variación que se llevó al Consejo de Ministros y el Consejo de Ministros no tuvo inconveniente en aceptar a propuesta del Ministro de Hacienda, no tengo nada que decir más que hacer mías las palabras del Sr. Ruiz Gómez. Yo hago completamente mías esas palabras; yo no creo que nadie que haya visto ese expediente haya podido dudar un solo momento de la moralidad y la honradez de los que en él han intervenido. De esto no hay necesidad de hablar; tampoco puede hablarse de la legalidad cuando se trata de un decreto del Consejo de Ministros, y en aquellas circunstancias de manera que cualquiera que sea la informalidad aparente en este expediente, queda explicada por las circunstancias críticas en que se promovió, por la necesidad que había de traer tabacos en el menos tiempo posible, por no existir los necesarios en las fábricas, y por las razones que tan detalladamente ha dado el Sr. Ruiz Gómez. Concluyo, pues, haciendo mías las palabras que respecto del juicio que merece ese expediente ha pronunciado el señor Ruiz Gómez, no sólo en cuanto a la moralidad de los funcionarios públicos que en él han intervenido, sino también en cuanto a la legalidad del acto.